lunes, 1 de abril de 2013

Orgullosamente salvadoreño

Hace unos días me presentaron un blog de un escritor salvadoreño, en el cual escribía de una forma bastante peculiar la realidad del salvadoreño.
En dicho blog se presenta a un salvadoreño astuto, que le gusta hacer trampa para lograr sus objetivos, un salvadoreño acostumbrado a la violencia, a la indisciplina, un salvadoreño al que "le vale todo".
Cuando vi ese blog, en un primer momento lo vi de una forma graciosa ya que no podemos negar que muchas de las cosas que ahí se presentan son ciertas, sin embargo luego de estar leyendo algunos párrafos del mismo, mi percepción comenzó a cambiar y me di cuenta que dicho blog solo presentaba lo malo de la cultura salvadoreña.
Ante esta realidad me puse a reflexionar sobre si verdaderamente el salvadoreño es tan malo como lo que ahí se presenta, y me di cuenta que no, que esa es solo parte de nuestra cultura; hace años el salvadoreño era visto en el mundo como una persona trabajadora, con deseos de salir adelante sin embargo al parecer esa imagen ha cambiado mucho en los últimos años.
Y cuando veo blogs como el descrito anteriormente me doy cuenta que si ocupamos el Internet para escribir eso, lejos de ayudar a que se nos quite esa mala imagen que tenemos, hacemos todo lo contrario al decirle al mundo, señores el salvadoreño es un desordenado, un irreverente,  etc.
Me rehúso a aceptar eso, porque aunque día a día vivimos esas situaciones, el verdadero salvadoreño sigue siendo aquel que trabaja y se esfuerza por salir adelante, y que fundamenta sus anhelos en valores morales y su confianza en Dios.
Debido a todo lo anterior es que e decidido volver a escribir en este blog, con el objetivo de presentar al mundo, la otra cara de El Salvador, esa de la que casi nadie habla, pero que es mayoritaria, esa que no es sinonimo de violencia, sino de paz, esa que no es sinónimo de oscio, sino de trabajo, ese salvadoreño que cada mañana se levanta confiando en Dios y en un futuro mejor.
Quizás mi tiempo sea un poco corto para escribir, pero intentare cada vez que pueda venir a este blog a escribir las cosas buenas que ocurren en nuestro país.